El Veredicto Final: Norma Jean - Meridional
En el momento de empezar a escribir esto solo llevo dos escuchas completas de "Meridional", lo nuevo de Norma Jean, pero es que desde que empezaron a sonar en mi reproductor las sensaciones se agolparon a ritmo de metal, obligándome a dar las razones por las que hoy (y lo más seguro es que en mucho tiempo también) me lo voy a escuchar miles de veces.
Aunque, englobados dentro del conocido como metalcore cristiano (que básicamente es lo mismo, pero con un toque bastante religioso bastante importante en las letras), en el caso de la banda de Georgia, así como en el de sus compañeros de escena Underoath, hay que ser mucho más abiertos e incluirles en el ámbito global de la definición, obviando el aspecto cristiano, pues si algo han demostrando conforme han pasado los años es que su música donde se disfruta es en directo y no en la iglesia, razón por la cual han conseguido que los fans más puristas del metal, esos que aun piensan en sexo y drogas, además de en borracheras, se hayan acercado a su propuesta, a la cual muchos se han enganchado debido a la brutalidad de la misma, pues si por algo destacan es por la tralla que meten. Aunque claro, no todo es blanco o negro en "Meridional", ya que si vas ahondando en sus profundidades (o las del elefante que ilustra la portada) te das cuenta de conforme han ido pasado los años, y con el los trabajos, su propuesta ha añadido un toque más melódico, con el que acercarse al sentimiento general, aquel que sigue teniendo en Killswitch Engage a la principal banda del genero.
Pero mientras los últimos se han estancado sin visos de que la cosa vaya a mejorar en los próximos años, los que hoy nos interesan han dado un paso hacia adelante, pero sobre todo un paso hacia la consolidación como banda, algo que les ha costado cuatro discos (realmente tres si contamos solo los que tienen a Cory Brandan como cantante) y que ahora en su nuevo trabajo (el quinto en discordia) solo han tenido que reafirmar. ¿Como lo han conseguido? Lo principal ha sido cambiar de productor, pasando del omnipresente Ross Robinson a Jeremy Griffith (Saosin, entre muchos otros), con quien han conseguido expandir su sonido, olvidando en algunos momentos el meter tralla por meter, algo de lo que se suelen caracterizar mucho algunas de las producciones de Ross, y que Jeremy ha evitado, como bien se demuestra en "High Noise Low Output", "Septentrional" o "Falling From The Sky: Day Seven", temas en los que otros elementos hacen acto de presencia, ya sea voces más melódicas (que quedan que ni pintadas entre tanto barullo instrumental) o partes más experimentales. Aun así, no se olvidan de que es lo que les ha hecho ser tan queridos y nos vuelven a traer momentos muy duros y difíciles de digerir, como es el trio inicial formado por "Leaderless And Self Enlisted", "The Anthem Of The Angry Brides" y "Deathbed Atheist" o "Blood Burner". Se que me va a ser difícil el poder verles en concierto pero si pudiera les pediría con todas mis fuerzas que empezarán el mismo con la misma fuerza, y a ser posible con los mismos temas, que aquí, pues son otra nueva muestra de que tienen mucho que sacar afuera.
Se que las comparaciones son odiosas y que tener que ponerlo en el contexto de su discografía mucho más, pero si por algo destaca su nuevo trabajo, es por sus ganas de no ser uno más y quedarse estancados, sino que han querido aportar algo nuevo a su propuesta (ya sea más melódico, más progresivo o más experimental) con lo que así demostrar que aun tienen mucho que decir. Habrá que ver el mes que viene si Underoath no han perdido fuelle y pueden seguir liderando junto a los aquí reseñados una escena que de católica ya tiene poco.
Ah, y por cierto, en el tiempo que he tardado en hacer esta crítica ya me lo he puesto un par de veces más, y las que aun quedan, pues como desestresante viene que ni pintado.
Aunque, englobados dentro del conocido como metalcore cristiano (que básicamente es lo mismo, pero con un toque bastante religioso bastante importante en las letras), en el caso de la banda de Georgia, así como en el de sus compañeros de escena Underoath, hay que ser mucho más abiertos e incluirles en el ámbito global de la definición, obviando el aspecto cristiano, pues si algo han demostrando conforme han pasado los años es que su música donde se disfruta es en directo y no en la iglesia, razón por la cual han conseguido que los fans más puristas del metal, esos que aun piensan en sexo y drogas, además de en borracheras, se hayan acercado a su propuesta, a la cual muchos se han enganchado debido a la brutalidad de la misma, pues si por algo destacan es por la tralla que meten. Aunque claro, no todo es blanco o negro en "Meridional", ya que si vas ahondando en sus profundidades (o las del elefante que ilustra la portada) te das cuenta de conforme han ido pasado los años, y con el los trabajos, su propuesta ha añadido un toque más melódico, con el que acercarse al sentimiento general, aquel que sigue teniendo en Killswitch Engage a la principal banda del genero.
Pero mientras los últimos se han estancado sin visos de que la cosa vaya a mejorar en los próximos años, los que hoy nos interesan han dado un paso hacia adelante, pero sobre todo un paso hacia la consolidación como banda, algo que les ha costado cuatro discos (realmente tres si contamos solo los que tienen a Cory Brandan como cantante) y que ahora en su nuevo trabajo (el quinto en discordia) solo han tenido que reafirmar. ¿Como lo han conseguido? Lo principal ha sido cambiar de productor, pasando del omnipresente Ross Robinson a Jeremy Griffith (Saosin, entre muchos otros), con quien han conseguido expandir su sonido, olvidando en algunos momentos el meter tralla por meter, algo de lo que se suelen caracterizar mucho algunas de las producciones de Ross, y que Jeremy ha evitado, como bien se demuestra en "High Noise Low Output", "Septentrional" o "Falling From The Sky: Day Seven", temas en los que otros elementos hacen acto de presencia, ya sea voces más melódicas (que quedan que ni pintadas entre tanto barullo instrumental) o partes más experimentales. Aun así, no se olvidan de que es lo que les ha hecho ser tan queridos y nos vuelven a traer momentos muy duros y difíciles de digerir, como es el trio inicial formado por "Leaderless And Self Enlisted", "The Anthem Of The Angry Brides" y "Deathbed Atheist" o "Blood Burner". Se que me va a ser difícil el poder verles en concierto pero si pudiera les pediría con todas mis fuerzas que empezarán el mismo con la misma fuerza, y a ser posible con los mismos temas, que aquí, pues son otra nueva muestra de que tienen mucho que sacar afuera.
Se que las comparaciones son odiosas y que tener que ponerlo en el contexto de su discografía mucho más, pero si por algo destaca su nuevo trabajo, es por sus ganas de no ser uno más y quedarse estancados, sino que han querido aportar algo nuevo a su propuesta (ya sea más melódico, más progresivo o más experimental) con lo que así demostrar que aun tienen mucho que decir. Habrá que ver el mes que viene si Underoath no han perdido fuelle y pueden seguir liderando junto a los aquí reseñados una escena que de católica ya tiene poco.
Ah, y por cierto, en el tiempo que he tardado en hacer esta crítica ya me lo he puesto un par de veces más, y las que aun quedan, pues como desestresante viene que ni pintado.
Conectado Con: Norma Jean - Deathbed Atheist (El Vídeo)
Etiquetas: El Veredicto Final, Estados Unidos, Metalcore, Norma Jean